Seis Áreas de Mejora antes de la Próxima Crisis de la Cadena De Suministro
Apr 28, 2020 • 4 min.A medida que el shock inicial por la pandemia de coronavirus va disminuyendo, los retailers están haciendo balance sobre dónde están hoy y cómo será su futuro. Lamentablemente, no va a haber forma de evitar que muchos retailers, especialmente las tiendas independientes y pequeñas cadenas, se vean tan afectadas que no puedan recuperarse.
Durante el próximo año vamos a ver más consolidación en retail. Aquellos retailers que puedan reabrir deben reevaluar todo aquello que pensaban que sabían sobre sus negocios, porque las estrategias que servían para la “vieja normalidad” no servirán para dar soporte al crecimiento de la nueva normalidad sin un reajuste reflexivo.
La crisis de la COVID19 ha dejado claro que los retailers, casi sin excepción, tienen que hacer que la mejora de la cadena de suministro sea una prioridad urgente. A continuación, os presentamos nuestros pensamientos sobre cómo y para qué deberían prepararse los retailers.
1. Iniciativas para hacer que las cadenas de suministro sean más flexibles y adaptables
Tradicionalmente, el retail ha sido un negocio bastante estable, con tasas de crecimiento similares, especialmente en el sector de la alimentación. El impacto del coronavirus en los patrones de demanda ha dejado patente lo rápido que pueden cambiar las cosas y lo poco preparados que están los retailers para adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones.
No es tarea fácil para los cientos de miles de empleados de retail planificar y gestionar decenas de millones de flujos de productos cuando las dramáticas desviaciones de la demanda disminuyen su estabilidad.
Debería haber una mayor urgencia en invertir en mejorar las previsiones de la demanda, la gestión de inventario, la optimización de promociones y la optimización de personal para estar preparado para nuevos escenarios de pandemia similares que puedan llegar, o nuevos brotes durante el próximo año, como creen algunos expertos. Las soluciones tecnológicas deben ayudar a las empresas para que reaccionen más rápido a las sacudidas de las cadenas de suministro, que podrían tener un impacto significativo en las áreas operativas, por ejemplo, la capacidad de cambiar flujos de material rápidamente, la colaboración de la cadena de suministro, la gestión de la capacidad, priorización del surtido y asignaciones.
2. Una Base de Proveedores Diversificada
Los espectaculares incrementos de demanda que los retailers esenciales han visto en los últimos tiempos, han empezado ya a nivelarse según muchos de nuestros clientes, y no esperamos que unos niveles de inventario más altos vayan a ser la nueva norma.
Pero el hecho sigue siendo que muchos retailers continúan haciendo frente a la escasez de inventario debido a las inflexibles estrategias de abastecimiento.
Para mejorar la capacidad de gestionar cambios en la distribución, muchos retailers están poniendo en marcha estrategias de gestión de riesgo para su reabastecimiento. La cadena de suministro no debería depender excesivamente de compras a largo plazo, de un pequeño grupo de proveedores específicos o de regiones específicas de suministro. No es bueno confiar en un solo proveedor a nivel de categoría, aunque pueda ser una estrategia más barata, el riesgo es enorme. En cualquier caso, como la implementación tiene un coste, puede haber compensaciones considerables a tener en cuenta.
3. Relaciones más colaborativas con los proveedores.
Después de semanas de escasez de inventario, los retailers ahora están muy enfocados en las capacidades de sus proveedores para entregarles el stock. Afortunadamente, los clientes que han construido relaciones fuertes con sus proveedores han reportado una colaboración excelente y altos niveles de visibilidad tanto para la necesidad como la disponibilidad, muchos proveedores están dando a sus clientes visibilidad anticipada de lo que pueden entregar, mientras que muchos retailers están más abiertos a compartir proactivamente sus pronósticos de demanda con los proveedores para asegurar altos niveles de servicio.
4. La agilidad será clave para cambiar los flujos de material
Para muchos retailers, los centros de distribución han sido uno de los mayores cuellos de botella en la crisis de la cadena de suministro del coronavirus. Pero incluso para los retailers con los centros de distribución más eficientes, debe haber procesos que les permitan cambiar rápidamente los métodos de entrega cuando sea necesario. Cuando aparecen problemas de capacidad, los retailers necesitan la agilidad para cambiar rápidamente a “crossdocking” o entrega directa de proveedor a tienda.
5. Mejoras para la gestión de la capacidad
Para mantener una disponibilidad alta para los clientes mientras se gestionan las restricciones de capacidad, muchos retailers están cambiando a tamaños de lotes más grandes. Tradicionalmente, han sido los retailers de “discount” los que han hecho un mejor uso de lotes grandes en sus tiendas. Los retailers tradicionales estarán mejor servidos si profundizaran en las Mejores Prácticas para prepararse para tiempos como éste; cuando los lotes grandes son una necesidad para cumplir con la demanda del consumidor.
Los retailers también necesitan procesos para priorizar su surtido y asignar productos cuando experimentan problemas de capacidad. Para los retailers esenciales, la demanda ha sido, obviamente, inmanejable, especialmente en los primeros días de la pandemia de la COVID19 cuando el consumidor hacía acopio masivo de productos. Al reducir el surtido y optimizar la asignación es posible asegurar que los productos mantienen una alta disponibilidad.
6. Más rápido, más seguro, más eficiente
En general, los retailers deben mejorar sus procesos de toma de decisiones, así como la comunicación y la visibilidad, interna y externa con proveedores, para ser más rápidos y eficientes. Aún muchos retailers siguen aplicando las estrategias conservadoras que les han perjudicado durante este período de retos sin precedentes para las cadenas de suministro. Los tiempos de toma de decisiones lentos y burocráticos son cosa del pasado.
Los retailers que se mueven lentamente aprenderán grandes lecciones de esta experiencia. Más compañías cambiarán hacia unos procesos de toma de decisiones más eficientes, más rápidos y más reactivos, basados en comunicaciones abiertas y altos niveles de transparencia para estar mejor posicionados para el éxito.